Historia de Ana Karen Flores Osorio •
En un movimiento que denota intensificación en la investigación, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) ha llevado a cabo un impactante operativo en el reconocido establecimiento nocturno Black Royce, ubicado en Naucalpan de Juárez, Estado de México.
La acción, enfocada en el caso Iñigo Arenas, ha involucrado a un equipo especializado de perros rastreadores y ha capturado la atención de la opinión pública. El reloj marcaba las 10:10 horas de este martes 08 de agosto cuando una patrulla de la policía municipal de Metepec arribó al lugar, acompañada por al menos dos binomios caninos altamente entrenados.
¿Qué buscan los binomios caninos?
Estos equipos ingresaron al establecimiento con el objetivo de rastrear posibles sustancias ilícitas, lo que sugiere que la pesquisa podría estar tomando un nuevo giro en busca de elementos que esclarezcan el caso.
No obstante, este evento no se produjo de manera aislada. Apenas una hora antes, agentes de la policía de Investigación y peritos pertenecientes a la Fiscalía Edomex habían irrumpido en el recinto, atravesando las puertas con contundencia. La escena evoca un enfoque decidido por parte de las autoridades para explorar todas las facetas posibles de este misterioso caso.
Cabe señalar que el bar Black Royce, desde el pasado domingo, permanece con sus puertas selladas, y en su fachada se han colocado letreros con la inscripción “inmueble asegurado”, signo visible de la acción legal que ha rodeado al lugar tras el hallazgo del cuerpo sin vida del empresario Iñigo Arenas Saiz en una de sus salas VIP, aunque esto no ha sido completamente confirmado ya que se difundió al inicio que su cuerpo estaba en una salida del recinto nocturno.
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